Ya estamos de ferias por Andalucía, y para mí un suplicio son los pendientes de flamenca, cuanto más grandes mejor, pero cómo pesan!!!!!!
Solución: hacerlos con cartón.
Sí, sí, con cartón de cajas de cereales sin ir más lejos, suena a cutre, ¿verdad?, pues con un poquito de maña, y cuatro tonterías conseguimos unos pendientes únicos.
Necesitaremos:
Cartón (sirve de cualquier envase que tengáis por casa)
Pegamento supergen y araldit
Lazos, telas, puntillas, ondulina o lo que queráis
Alambre
Pendientes viejos
Proceso:
Es bien sencillo, dibujamos en un papel el tamaño de pendientes que queramos y hacemos una plantilla que repetiremos en el cartón tantas veces como pendientes queramos y recortar. Yo pegué dos caras de cartón por cada pendiente para que fuera más durito.
Hice dos pares diferentes, unos con lazo y puntilla, y otros con tela blanca y ondulinas.
Para los rojos pegué la punta del lazo y puse pegamento por una cara del cartón, se va enrollando con cuidado y se utilizan pinzas de la ropa para fijarlos
Una vez terminados se pega la puntilla sobre el pendiente, mi fallo de novata fue no pegarlos también por detrás, y se veía un poco feo cuando el pendiente se movía.
Para unirlo al pendiente hice una espiral con alambre y la pegué con pegamento araldit, una vez seco se abre con cuidado, y una pinza o alicate, la argolla del pendiente y se pasa por el enganche que hemos hecho con alambre y listo.
Para los siguientes utilicé la misma plantilla sobre la tela y pegué con supergen la tela por las dos caras del cartón. Una vez secos, pegué la ondulina verde, y la morada, al ir haciendo la curva del borde la fui fijando con pinzas. Una vez seco, pegué la misma ondulina morada por la cara trasera con cuidado de que coincidieran las ondas.
Para terminar, mismo proceso que los anteriores, espiral de alambre y pendientes viejos.
Y aquí tenéis el resultado:
Espero que os haya gustado :)
